// you’re reading...

Guatemala

Guatemala: Estado mínimo – por Estuardo Zapeta

Compartir esta publicación:

Argumenta Friedrich A. Hayek que “creemos incuestionable que en una sociedad avanzada el gobierno tiene que usar su propio poder para recaudar fondos a través de los impuestos para ofrecer una serie de servicios que por diversas razones no puede prestar —o no puede hacerlo de manera adecuada— el mercado” (en Derecho, Legislación y Libertad: una nueva formulación de los principios liberales de la Justicia y de la Economía Política, capítulo XIV).

El argumento central del Premio Nobel de Economía tiene su base en que el sector público será reflejo de sus funciones y poderes “limitados”; mientras que los del sector privado tendrán la libertad de producir, hacer, y “dejar hacer”, con el respeto de los derechos de “los otros” a la Vida, la Propiedad y la Libertad.

De hecho, las funciones de gobierno, según Hayek, estarían limitadas a los campos de la justicia y el de “la defensa”. Nada más. El resto lo podemos hacer los individuos libres asumiendo nosotros nuestros riesgos y respetando los derechos de “los otros” de manera que el sistema “en paz” es el más eficiente para lograr el desarrollo de cada persona, según sea su gusto y su gana.

La palabra clave de Hayek es “límites”. De hecho, otro gran argumento de este gran pensador, teórico del Derecho, es que el Estado (y su parte puramente de acción, el gobierno) se ha “extralimitado”, o sea, se ha convertido en un monopolio y actúa contra el individuo y sus derechos, deslegitimando así, no solo su función, sino también convirtiéndose en enemigo del individuo, quien a su vez deberá buscar la manera de defenderse del ataque del “Estado Ilimitado” en poderes, los cuales se vuelven autodestructivos para el sistema y destructores de las personas.

Hayek también responde esa pregunta —necia, en mi opinión— de si “el Estado” debe “dar los servicios”, o está obligado a “dar” los servicios que, digamos, se financian con nuestros impuestos: “al contrario de lo que suele darse como descontado, el hecho de que algunos servicios deban financiarse con impuestos obligatorios no implica que estos servicios deban ser administrados por el gobierno. Una vez resuelto el problema financiero, el método más eficaz será normalmente el de dejar la organización y la dirección de esos servicios a una empresa que opere en el mercado”. Y como ejemplo de un sistema de esa naturaleza, Hayek pone de ejemplo el sistema de “bonos” de financiamiento para la educación, pero entregados a la demanda, no a la oferta, que propuso Milton Friedman. De hecho, algo parecido a lo que hicimos en el Pronade, mientras este “Programa Nacional de Autogestión (financiera) Educativa” existió, y del cual me siento muy orgulloso de haber contribuido en su diseño e implementación… y que luego los “sindicatos” cerraron con el apoyo del gobierno de Sandra y Álvaro.

Me queda la satisfacción, junto con muchos otros profesionales guatemaltecos, que la propuesta de Friedman y luego secundada por Hayek, funcionó en Guatemala beneficiando a miles de niños.

Fuente: Centro de Estudios Económico – Sociales (Guatemala)

(Total: 53 - Today: 1 )

Discussion

No comments for “Guatemala: Estado mínimo – por Estuardo Zapeta”

Post a comment

Connect to HACER.ORG

FB Group

RECOMMENDED BOOKS

Support HACER today!

HACER is a tax-exempt organization under Section 501 (c)(3) of the Internal Revenue Code, our supporters will find their donations to be tax-deductible. Donate online now!