Si las noticias de prensa se confirman, hoy 1 de octubre asume un nuevo presidente del Banco de Guatemala (Banguat), Édgar Barquín, y también nuevo encargado de la Superintendencia de Bancos.
¿Qué impacto tiene esto en la vida diaria de los guatemaltecos y en su economía?
El Banguat tiene injerencia o influye sobre la inflación, las tasas que pagamos cuando se pide un préstamo y preside la entidad que emite opinión sobre si es posible o no tomar como país más préstamos (la Junta Monetaria).
En otras palabras, si en un momento dado el Banguat llega a politizarse, la estabilidad macroeconómica del país —que es de las pocas cosas que se elogia de la situación de Guatemala para atraer inversión extranjera— puede verse afectada y golpear los bolsillos de los guatemaltecos. Así que si el barco Banguat lo dirige Barquín en forma no técnica y sí politizada, saber qué embarquinados podemos terminar.
La otra entidad que también cambia es la Superintendencia de Bancos, que se encarga de supervisar el sistema financiero en Guatemala, y bajo su influencia se encuentra la Intendencia de Verificación Especial (IVE). Muchos guatemaltecos solo conocen de esta entidad cuando van al banco y le piden que llene largos cuestionarios de información, donde casi hay que poner el nombre del chucho o el gato de la casa. La IVE es la encargada de velar que se aplique la Ley de lavado de dinero en el país.
Y otra vez, si se llega a politizar esta entidad puede pasar que si quiero “fastidiar” a un oponente o crítico del Gobierno, pues a “abrirle” investigación para complicarle la existencia.
Y al contrario, quien controla esa entidad, si se politiza, puede parar o entorpecer investigaciones sobre lavado de dinero, ya sea del narcotráfico como de dinero robado al Estado y que se esté lavando en el sistema bancario.
Como se ve, ambas entidades tienen una enorme influencia en la vida común del guatemalteco y en la capacidad del país para atraer inversión extranjera. Con una deuda del sector público de casi el 25 por ciento del Producto Interno Bruto, déficits fiscales en aumento y el país acercándose a los valores críticos, la pregunta es: ¿Se mantendrá la institucionalidad del Banco de Guatemala o se politizará con las nuevas autoridades? ¿Y la Superintendencia de Bancos?
Con sus defectos y virtudes, el Banguat ha sido la institución más solida del país.
Fuente: Prensa Libre (Guatemala)
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