Ahora el autor material, del atentado del 15 de mayo de 2012, un delincuente de 16 años, correrá con toda la responsabilidad del horrible asesinato de dos escoltas del Ministro Londoño,  de las múltiples heridas al personaje y del daño que semejante atentado le causa a él y a su familia. Y de las heridas y traumatismos de todo orden a decenas de inocentes pasajeros de un bus municipal. El intento de magnicidio quedó resuelto. ¡Así se hace! El mundo entero registrará con mucha complacencia la profunda investigación, seremos un ejemplo para las naciones en materia de indagación judicial. Con una Fiscalía así, de que nos preocupamos.

¡Maravilloso!

Yo creo que ese muchacho, criminal confeso, no se perdía el diario análisis de Fernando Londoño sobre el acontecer nacional en “la Hora de la verdad”, y eso pudo haberlo convencido, habida cuenta del detallado conocimiento que alias “carne” tiene de Colombia, de la necesidad de privarle de  la existencia al Ministro. Esa insistencia de Fernando Londoño en el daño que le causa la revaluación a nuestros exportadores puede haber desesperado a alias “carne”.

De modo que no fueron las FARC, sino este muchacho, que seguramente pertenece a esa Bacrim denominada “el parche del Zuley”. No podemos pretender esa insistente persecución a los muchachos guerrilleros, en un caso como este en el cual desde un comienzo esa absurda opción quedó descartada. En cambio su autoría intelectual en el atentado al Ministro si es evidente, la prueba es que este muchacho en Cali robaba motocicletas.

Pretender la “autoría mediata” de alguna organización criminal, al decir del tratadista penal Clauss Roxin, también hay que descartarlo, puesto que la única que mediante Sentencia Judicial de un Tribunal ha sido reconocida como tal en Colombia, ha sido el Ejército Nacional, y esa organización no cuenta con bombas Lapa.

Pensar que haya intereses políticos en eliminar a Londoño para que no pueda alcanzar cargos públicos en los cuales pueda ser un peligro para la sociedad, también hay que descartarlo. De hecho el Ministro Londoño ya se sabe que es un peligro para la sociedad. Donde hubiera seguido un par de años más como Ministro del Interior y de Justicia, acaba con la principal fuente de divisas de nuestro país. Cinco mil millones de dólares al año, no es una cifra pequeña. Menos mal que mediante sentencia judicial ya lo marginaron. Eso le pasó por haberse metido con un prohombre como el Juez Suarez Vacca cuando dejó en libertad al benemérito Gilberto Rodríguez Orejuela.

No se me puede olvidar como cantidad de cadenas de oración pidieron por su permanencia en el servicio público. Finalmente triunfó una cadena de droguerías llamada Drogas La Rebaja.

Ese muchacho alias “carne” si sabía lo que hacía. Él se enteró de las ejecutorias de Fernando Londoño en el Ministerio del Interior y de Justicia y la cantidad de narcotraficantes que despachó hacia las cárceles de los Estados Unidos. O es que creen que alias “carne” no estaba enterado de los procesos y de los listados de los cuatrocientos o más generadores de riqueza, que terminaron en la nación del norte encarcelados con la firma del Ministro?

Hay que ver como alias “carne” o “el piloto” con sus dieciséis añitos, desde Cali vivía enterado de los recorridos que el ex Ministro periodista realizaba diariamente, y conocía su rutina y sus costumbres. Desde Cali es muy fácil enterarse el nivel de blindaje de los carros que transportan a los personajes de Bogotá, y en que asientos van cada uno de los ocupantes del vehículo. Y qué decir de los tiempos del cambio de semáforo en una calle de Bogotá. Por eso no se apresuró en la colocación del explosivo. Desde Cali se sabe que los semáforos se pueden controlar a través de funcionarios de la Alcaldía de la Capital de Colombia. Eso no vale la pena investigarlo.

Me parece que ocho años de aprehensión es una buena sanción para ese muchacho. Ahora lo importante es resocializarlo. Podrían por ejemplo conseguirle una beca en la Universidad de Lovaina, donde tantos ex M-19 recibieron beca en gobiernos anteriores, y luego de resocializarse no volvieron a asesinar y secuestrar militares, policías y civiles, mujeres y niños, sino que aprendieron a Gobernar, y mire que bien que lo han hecho y lo siguen haciendo. Eso se llama resocialización.

Finalmente pretender que alias “carne” o el “piloto” era un pobre gamín caleño que cumplió una tarea sin saber siquiera contra quien iba a poner la bomba, a cambio de unos cuantos pesos, es un despropósito que solo busca acusar injustamente a distinguidos dirigentes de la nación y a sacrificados combatientes del pueblo que luchan contra esa “organización criminal” llamada Ejército.

Veamos la noticia: “Un menor de edad confesó su responsabilidad en el atentado al ex ministro Fernando Londoño” – Radio Santafé, Bogotá

Un menor de edad, sindicado de pegar la bomba tipo lapa en el techo de la camioneta donde se trasladaba el ex ministro del Interior, Fernando Londoño, aceptó los cargos imputados por la Fiscalía. Como alias ‘carne’ o ‘piloto’ fue identificado el adolescente de 16 años quien frente a un juez de menores admitió los delitos de homicidio agravado, lesiones personales, terrorismo, concierto para delinquir y tentativa de homicidio agravado. Alias Carne es uno de los seis capturados dentro de la investigación por el atentado al ex ministro. El adolescente, fue arrestado en la capital del Valle, y además está sindicado de pertenecer a la oficina de cobro de Cali ‘El Parche de Zuley’, donde se le acusó de haber participado en actividades de microtráfico, porte ilegal de armas, hurto de motocicletas y al parecer algunos homicidios que son materia de investigación. El joven de 16 años se allanó a los cargos ante un juez de menores poco después de que se anunciara que sería llevado a juicio. La audiencia donde se conocerá el monto de la pena, que sería de aproximadamente ocho años de aprehensión, se realizará el próximo 11 de marzo. El menor que utilizó una peluca y una bata durante el atentado, registrado el 15 de mayo de 2012, se ubicó al lado del vehículo donde viajaba Londoño y pegó rápidamente la bomba, en el lugar de los hechos dejó la peluca y ésta sirvió como prueba para la Fiscalía, tras el análisis de ADN. El atentado dejó dos víctimas mortales, escoltas del exministro, y decenas de heridos.

Fuente: HACER