El digital español “El Confidendial” afirma, este domingo, que el sanguinario miembro de ETA Ignacio de Juana Chaos estaría en Venezuela, según los datos de los que disponen los servicios secretos españoles (CNI).
Los once disidentes cubanos llegados la semana pasada a Madrid dijeron sentirse “engañados” por el gobierno español, al cual acusaron este lunes de no cumplir sus compromisos.
Oswaldo Álvarez Paz, ex candidato presidencial y ex gobernador de Zulia, afirma que los vínculos del actual gobierno con organizaciones terroristas llegan hasta los radicales palestinos.
Lo interesante del caso es que los países con mayores problemas, hasta el momento, son aquellos gobernados por socialistas (Grecia, Portugal y España).
Un progre, que permanece inmutable cuando Sudán asesina cincuenta mil personas, se indigna ante el lamentable incidente de la flotilla el que murieron diez activistas mahometanos.
Diversos analistas sostienen que el drama europeo se centra en la iliquidez, sumado a una irresponsable política fiscal. Todo ello es cierto; no obstante, esos son los efectos, no las causas
“Señor Presidente, le pido que nunca más me vuelva a hablar en esta Cámara de derechos sociales”. Así, con esas crudas palabras, el líder del Partido Popular replicaba a don José Luis Rodríguez Zapatero, y culminaba en el Congreso el mayor recorte de derechos sociales.
El escondite de ETA en Venezuela es un pueblo pesquero en el CaribeEl pueblo pesquero venezolano de Güiria da cobijo, según El Mundo, a multitud de etarras. El escondite de los terroristas que Chávez se negó a extraditar acoge a asesinos como Lorenzo Ayestarán, que hoy es un próspero empresario.
El socialismo domina los espíritus en Europa, mientras que el mundo universitario, mediático e intelectual acosa al liberalismo. Estos Estados del Bienestar, debido a su coste financiero y a la falta de responsabilización ética que legitiman, han asfixiado el crecimiento económico en Europa.
Una lástima que le hayan prohibido al Rey que volviera a hablar sobre Chávez, después del inolvidable “por qué no te callas”.