Guatemala: La nueva piñata: Petrocaribe – por Luis Figueroa
Guatemala: El sistema estatista de educación tiene éxitos políticos de gran valor para el estatismo y para el colectivismo. Forma sujetos igualitariamente incapaces; acostumbrados a pedir, a exigir y a recibir. Deformados en aulas en las que los valores son la obediencia y la igualdad; no la exploración y la diversidad.
Guatemala: El juicio por genocidio en contra del general Ríos Montt ha elevado el nivel de polarización en la opinión pública. Yo no creo que el diverso apoyo al general sea por un repentino aumento en su popularidad. Más bien creo que es porque muchos se hacen una elemental pregunta: si guerrilla y ejército cometieron crímenes… ¿por qué sólo se juzga a militares? Y ¿cuándo se juzgará a un guerrillero?
Durante 36 años, grupos armados marxista-leninistas y maoístas castigaron a los guatemaltecos con un enfrentamiento plagado de terrorismo, que costó miles de muertos. Uno de los actos terroristas más inescrupulosos fue el de septiembre de 1980. ¡Dos bombas fueron plantadas en el Parque Central! Su proposito era el de establecer la dictadura del proletariado. El comunismo no asusta porque sea una palabra; sino porque es espantoso y sus muertos se cuentan por millones: 61 en la URSS, 76 en China, y así podemos seguir contando.
Cuando adviertas que para producir necesitas obtener la autorización de quienes no producen nada; cuando compruebes que el dinero fluye hacia quienes trafican no bienes, sino favores; cuando percibas que muchos se hacen ricos por el soborno y por influencias más que por el trabajo, y que las leyes no te protegen contra ellos sino, por el contrario, son ellos los que están protegidos contra ti; cuando repares en que la corrupción es recompensada y la honradez se convierte en un autosacrificio, entonces podrás afirmar que tu sociedad está condenada.
Christopher Lingle, especialista en políticas públicas y profesor visitante de economía en la Universidad Francisco Marroquín (UFM), opina acerca de la pobreza, el papel del Estado y el TLC.
Los lobos de la política quieren seguir teniendo los mismos privilegios para poder “cuidar” a las ovejas ciudadanas. De cara a ese escenario, los ciudadanos debemos rechazar de tajo los diversos intentos de los políticos por cambiar nuestra Constitución.
El Cuco es un monstruo mítico con el que se asusta a los niños para que obedezcan a sus padres. No es casualidad que ese fuera el nombre abreviado de una “Cruzada contra la corrupción”, que hace años emprendió un grupo de amigos. Asusta, a los políticos y a sus funcionarios, la idea de ver su poder limitado.
El Artículo 133 de la Constitución de Guatemala impide que el Presidente le ordene a la junta directiva del banco central que eche a andar la maquinita productora de billetes.
¿Cuál es la Guatemala invisibilizada? La que pide igualdad de todos ante la ley; esa no consigue primeras planas, ni reportajes extensos en la tele. La que pide respeto a la vida, la libertad y la propiedad de todos; a esa ni una gacetilla. La que pide acabar con los privilegios; a esa se la oye, como oír llover. La que pide leyes generales, en vez de legislación específica; a esa solo se la sienta a la mesa para legitimar las pretensiones de las oligarquías citadas arriba. La Guatemala que no existe es la que pide una oportunidad para crear más riqueza.