FARC dicen que seguirán secuestrando a militares y policías. El pronunciamiento lo hicieron miembros del grupo terrorista que participan en los diálogos de paz con el Gobierno: “Nos reservamos el derecho a capturar como prisioneros a los miembros de la fuerza pública que se han rendidos en combate”…
La Suprema Corte de Justicia de México acaba de tomar una decisión que tendrá un impacto positivo no sólo en ese país sino en toda América Latina. Y sobre todo en Colombia. La SCJ estimó que un proceso penal en el que los órganos de policía y la administración de justicia violaron la ley y el debido proceso: no puede existir; pues los derechos de las personas deben ser respetados “de manera irrestricta”. Se trata del caso de la joven francesa de 38 años Florence Cassez, detenida en ese país desde 2005.
Incertidumbre y agobio. Estos son los dos sentimientos que albergan los familiares de Javier Leandro Ochoa Aguilar y José Antonio Mamani Saico, los dos ciudadanos peruanos secuestrados por el Eln el pasado viernes en Norosí, sur de Bolívar.
‘He dicho que mi gobierno quiere ser recordado en la historia como un gobierno decente’, afirmó el presidente Juan Manuel Santos. El problema del Presidente es que su discurso dista mucho de los hechos. Dice que su gobierno es ‘respetuoso de las diferencias y de las libertades’, pero no resiste los reparos a su administración y reacciona irascible ante la crítica lanzando duros calificativos a quienes la cuestionan. No es decencia ni respetar las diferencias cuando señala a sus críticos de “mano negra” o “tiburones”, etc
Al presentarse hechos que captan la atención de los medios surgen de inmediato opinadores que, luego de leer dos o tres comentarios, quedan graduados en el tema y pontifican sobre él. Eso ha pasado con el fallo sobre San Andrés.
Hay dos hechos que atormentan al presidente Santos porque a ellos se les atribuye su visible e irrefrenable pérdida de popularidad : la negociación con las Farc en Cuba y la sentencia de despojo de la Corte Internacional de Justicia. El Gobierno de Santos cree que achacándoles la culpa a los presidentes que le antecedieron podrá evadir la responsabilidad que le cabe en la conducción del proceso durante los dos años de recta final y decisiva.
En menos de dos meses las Farc modificaron las reglas del proceso de paz, para despejar uno de los temas más controvertidos de la agenda: el desarrollo agrario integral. La jugada consistió en hostigar al Gobierno para habilitar la “participación del pueblo” y, por esta vía, alterar la hoja de ruta, inclinar la balanza de la negociación y fisurar las bases del acuerdo. El “pueblo habló” -es decir, los asistentes al Foro Agrario- y se convirtió en la “camisa de fuerza” para filtrar, del enjambre de propuestas, sólo aquellas afines a su limitada visión de “lo rural” y legitimar la bandera demagógica de sus aspiraciones políticas: la tierra.
Esa guerrilla argumentó razones políticas en plagio de cinco trabajadores de minera en Bolívar.
El expresidente Álvaro Uribe Vélez continúa encendiendo el debate político a través de su cuenta de Twitter. Apenas dos días después de haber anunciado que el movimiento político del cual ahora forma parte, Centro Democrático, buscará participar en las elecciones de Congreso y Presidencia en 2014, el exmandatario ya cuestionó al presidente Santos por las declaraciones sobre el ministro Germán Vargas Lleras.
Mientras arreciaron las acciones violentas de las Farc en Colombia con nuevos ataques contra la infraestructura, hostigamientos y el secuestro de un comerciante, desde Cuba el grupo guerrillero continuó con propuestas para reformar el modelo agrario del país.