Los comercializadores y productores al detalle, venden 1.479 toneladas (t) métricas de hoja de coca en zonas fronterizas con destino a los mercados de Argentina, Brasil, Chile y Perú. Esta cifra se desglosa del Estudio Integral de la Demanda de la Hoja de Coca en Bolivia que hizo conocer ayer el Gobierno a todo el país.

El estudio también establece que tres de cada 10 bolivianos consumen coca de forma habitual y tradicional, es decir, 3.082.464 personas en total. Según el desglose de los consumidores, 1.125.483 personas consumen coca para el pijcheo; 961.349 usan la hoja para fines medicinales; 30.006 para rituales, 14.484 en acontecimientos sociales y 28.709 en otros usos.

La frontera

Según el ministro de Gobierno, Carlos Romero, la circulación de la hoja de coca en puntos fronterizos “predomina un 60% (2.247 t) en la distribución en la población que se mueve en frontera y un 40% (1.479 t) se desplazaría a puntos fronterizos contiguos al territorio boliviano, sobre todo en el sector de Argentina”.

Según su presentación, 42,56 toneladas están destinadas al mercado peruano, 4,16 t a Chile, 57,70 t a Brasil, mientras que a Argentina, llegan 1.374,97 t. Las 19 poblaciones fronterizas por donde sale la hoja de coca son Puerto Acosta, Desaguadero, Copacabana, Khasani, Pisiga, Uyuni, Villazón, comunidad La Mamora, Bermejo, Mecoya, Yacuiba, San José de Pocitos, D’Orbigny, Esmeralda, San Matías, Puerto Suárez, Puerto Quijarro, Guayaramerín y Cobija.

Exportación prohibida

El excanciller Armando Loayza cuestiona la comercialización de la coca con otros países, y pidió que el Gobierno reafirme ante la comunidad internacional su respeto a la Convención de Viena sobre Estupefacientes, y evite que el exceso de la producción de coca traspase las fronteras.

“Las convenciones a que está sometida el tráfico de drogas prohíbe la exportación de coca. Bolivia tiene que tener cuidado en cumplir sus obligaciones internacionales, ya que ha sido admitida a la Convención con severas limitaciones”, recordó.

Marco Antonio Ayala, coordinador del estudio del consumo de la hoja de coca, declaró que si bien no hay una norma que permita la exportación del arbusto, no se puede desconocer que “hay un paso” de la coca hacia más allá de las fronteras.

Explicó, por ejemplo, que la comercialización está prohibida en Argentina, pero el consumo es legal. Precisó que en base a un estudio argentino, la demanda es de 1.200 toneladas de coca en su estado natural, cuantificada en $us 120 millones.

Reglamento

El Reglamento de Circulación y Comercialización de la Hoja de Coca en su estado natural no permite comercializar la hoja fuera del país y establece estrictos mercados internos. Considera como “una falta grave” el hecho de comercializar fuera de estos mercados que fueron permitidos.

 El dirigente de la Federación nacional de Comerciantes Detallistas de la Coca, Emilio Choque, confirmó esta situación, aunque en la realidad, la venta del producto es intensa en las fronteras.

“La exportación no está autorizada, no hay una normativa, no hay convenio con gobiernos de otros países, pero a las fronteras llega la venta. Solo en Bermejo hay cerca de 700 comerciantes y productores detallistas que venden a personas que vienen desde Argentina a comprar el producto. Es un trabajo hormiga”, expresó.

El viceministro de Coca, Gumercindo Pucho, ratificó el hecho y añadió que como Gobierno “se está trabajando en concretizar acuerdos bilaterales para aquello y productos derivados”, no solo con los países vecinos.

Exportación sin alcaloide

A principios de enero, el exrepresentante de la oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Onudd) César Guedes dijo que la única forma hasta ahora para exportar coca es extrayendo el alcaloide, como lo hace décadas atrás la firma Coca Cola para hacer su saborizante que está debidamente certificado.

No obstante, en Bolivia aún no se ha fortalecido ese proceso y se desconoce el costo.

Mencionó que Bolivia reingresó a la Convención Única sobre Estupefacientes dependiente de la Organización de NNUU, con la reserva al mascado de coca (acullicu) pero “que no aceptó la exportación o mascado en otros países, siendo que la hoja está en la lista de sustancias controladas”.

No es vinculante

El Gobierno reveló el martes que en todo el país se consume anualmente 20.960 t de hoja de coca y que para ello, se precisa 14.705 hectáreas de este cultivo.

La Onudd estableció que este año existen 27.200 ha de cultivos en todo el país, por lo que hay un total real de 12.495 ha excedentarias de cultivos.

El Gobierno no ha definido aún qué hará con estos cultivos. El ministro Carlos Romero precisó ayer que en las 14.705 ha de coca no se establecen las necesidades para una probable industrialización de la planta o su exportación.

El Gobierno tampoco tiene en agenda la modificación de la Ley 1008, basados en los resultados del estudio, ya que sus datos no son vinculantes para ninguna norma. La ley antinarcótico establece 12.000 hectáreas de cultivos de coca

Costas desconoce el estudio de la coca

El gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas, desconoció ayer el estudio de la coca y propuso que sean menos de 10.000 hectáreas las que se legalicen.

En un acto realizado en la ciudad de La Paz, Costas declaró que los resultados del estudio no se acercan a la realidad y que “debería legalizarse entre 6.000 y 8.000 hectáreas de la planta”.

Asimismo, observó que hay un acuerdo entre el Gobierno y los cocaleros para incrementar la coca.

Asegura que toda la coca excedentaria se va al narcotráfico y que el Gobierno debería proponerse de una vez y defrente, a legalizar 40.000 ha.

Fuente: El Deber (Bolivia)