• El estaño está en US$ 10 por libra fina pero Comibol tuvo déficit el año pasado, según se desprende del informe del experto Germán Molina de Fundación Milenio. (Antes de este gobierno el estaño se cotizaba en US$ 1,90).

• El precio del gas natural que se exporta tiene un promedio de US$ 9 por millón de BTU, pero también YPFB registró déficit el año pasado. (Antes de este gobierno se cotizaba en US$ 0.90).

• Son diez las empresas estatales que registraron déficit el año pasado, a las que el Banco Central ha debido prestar US$ 5.345 millones, según se informó también el miércoles.

-Mientras se da este panorama en las empresas estatales, los empresarios denuncian que para poder exportar necesitan cumplir un total de 20 trámites que demoran 25 días.

• La Cepal informaba que el año pasado, Bolivia recibió 0,9% de las inversiones extranjeras que llegaron a Sudamérica. A la falta de una ley de inversiones durante nueve años, se suma ahora el anuncio de funcionarios del gobierno de que para nacionalizar cualquier empresa no hace falta que lo diga la ley, porque está contemplado en la constitución.

• El Latinobarómetro informaba esta semana que Bolivia es el segundo país más corrupto de América latina después de Haití.

-Sin embargo, algunas publicaciones internacionales están reproduciendo muy costosos “publirreportajes” en que se habla del “prudente” manejo que estaría haciendo de la economía el gobierno del presidente Evo Morales.

El informe de Milenio llega cuando el gobierno estaba lanzado en una campaña para convencerse a sí mismo y a los electores de que la economía mantiene un muy buen paso.

El ministro de Economía, Luis Arce Catacora, viajó a Estados Unidos para hablar del “modelo boliviano” y asegurar que, incluso con la caída de la demanda de materias primas que provoque la desaceleración de la China, Bolivia estará libre de sufrir consecuencias negativas.

Y, en efecto, el diario The Wall Street Journal dijo esta semana que en este momento la tasa de crecimiento de la economía china es la más baja de los últimos 18 meses.

Se estaría dando el caso de que a pesar de los precios de las materias primas que de alguna manera se sostienen, aunque de todos modos se registra déficit en las empresas estatales, hay todavía un “colchón” que sostiene a la economía boliviana.

Milenio no menciona ni hace alusión alguna a la economía ilegal y menos al narcotráfico, pero está claro que tiene una influencia muy grande y que quizá sea el verdadero “blindaje”.

Los expertos que tratan el tema dicen que la economía ilegal se llama así porque no se lleva estadísticas de ella. Pero no por eso deja de influir y a veces provoca bonanzas que de otro modo no se entienden.

Y también provoca fenómenos políticos como el que vive Bolivia.

Fuente: El Blog de Humberto Vacaflor (Bolivia)