La situación es ‘dramática’, así lo ha reconocido el propio presidente Evo Morales, las cifras aumentan cada día y el último informe oficial señalaba que son 48 las personas que perdieron la vida por los desastres provocados por las intensas lluvias que castigan a Bolivia desde finales del año pasado.

Hasta la mañana de este miércoles sumaban 54.493 familias damnificadas en 130 municipios ubicados en diferentes departamentos del país. La cifra de muertos alcanza a 48 y existen 15 desaparecidos, 10 de ellos son de la comunidad de Chullpa K’asa del municipio de Morochata en Cochabamba.

Este miércoles se reportó la desaparición de dos colegiales en Sud Yungas (La Paz) que fueron arrastrados por el río mientras intentaban cruzar con una soga, la intención de ambos era asistir a clases, pero no contaron con la furia del agua. Lo que podría elevar la cifra de víctimas mortales a 50.

Ayuda humanitaria

Hasta el momento se distribuyeron 251 toneladas de ayuda humanitaria a nivel nacional, de las cuales 186 toneladas son de alimento; 26 toneladas de instrumentos de trabajo; 12 toneladas de colchones, frazadas y 27 toneladas de refugios y otros.

El Gobierno boliviano ‘canalizará’ la cooperación ofrecida por embajadores de algunos países de la región y de la Unión Europea para fortalecer las tareas humanitarias ante los desastres naturales, que azotan distintas regiones del país, así lo hizo conocer el presidente este miércoles.

‘Ayer (martes) informe a algunos ministros y al vicepresidente (Álvaro García Linera) esta propuesta (de solidaridad) y estamos agradecidos por este apoyo brindado solidariamente, después de analizar, hemos decidido que vamos a canalizar esta cooperación de algunos países que nos han ofrecido anticipadamente ayudarnos’, señaló en conferencia de prensa dictada en Palacio de Gobierno.

Fuente: El Día (Bolivia)