El Gobierno descartó la compra de radares para el control del espacio aéreo y efectivizar la lucha contra el narcotráfico por falta de presupuesto y su elevado costo, informó ayer el viceministro de Defensa Social y Sustancias Controladas, Felipe Cáceres.

Ante esta falencia, dijo que se apunta a un trabajo conjunto con Brasil y Perú para el intercambio de información, acciones que serán analizadas el próximo año en una reunión trilateral.

La autoridad gubernamental dio a conocer esas decisiones, a la conclusión del acto de clausura de los cursos antidroga en el Centro de Adiestramientos de Canes de Cochabamba.

Cáceres explicó que el costo de un radar oscila entre 40 a 50 millones de dólares,  hecho que ha hecho desistir al Gobierno a adquirirlos, pues ese monto representa casi el total del presupuesto que maneja el Viceministerio de Defensa Social.

Agregó que a ese costo se debe incluir el presupuesto necesario para su mantenimiento, un millón de dólares año

La radarización de las fronteras del país era una de las políticas gubernamentales de la lucha contra el narcotráfico, con ello se pretendía, en coordinación con Brasil y Perú, optimizar el combate contra el narcotráfico.

Cáceres informó que las fuerzas antidrogas de Bolivia y Perú prepararon una estrategia para frenar el narcotráfico en Bolpebra, región fronteriza entre los dos países y Brasil. Según reportes de las fuerzas antidrogas de los dos países esta región es utilizada para la salida y tránsito de avionetas con droga.

En respuesta a las críticas a las acciones que se desarrollan en el país contra el narcotráfico y los sucesos violentos de Apolo, Cáceres reclamó al Defensor del Pueblo, Rolando Villena,  ecuanimidad en sus evaluaciones y seguimiento a las denuncias.

Cáceres destacó los resultados de la erradicación de cultivos ilegales de coca esta gestión de 11.400 hectáreas y la incautación de 20 toneladas de cocaína.

Fuente: EJU.TV (Bolivia)